Mi experiencia con el medio maratón

¡Buenos días!

¿Cómo se ha dado el finde? 

Esta semana va a ser una semana muy intensa, básicamente por algo que os contaré mañana, pero también súper emocionante y divertida... Aunque eso sí, como soy una chica súper formal, he dejado varios posts listos para no faltar a mi cita habitual con esta-nuestra comunidad durante toda la semana.

Hoy no puedo más que hablar de medios maratones. Ayer corrí esta distancia por segunda vez y lo pasé taaaan bien, disfruté taaaanto y estoy taaaan contenta con el resultado que hoy el tema no puede ser otro.

Como ya en Instagram Stories os he contado que corrí con unos compis muy top y que se nos dio a todas fenomenal, aquí voy a intentar hacer un post con más contenido, dirigido un poco a las que miráis el medio maratón con algo de miedo pero sentís que es algo que os gustaría probar. 

Mi experiencia. Aunque en 2014 estuve casi todo el año corriendo, no fue hasta 2016 cuando retomé esta afición de verdad. En mayo, para ser exactos, justo después de ver a los participantes del maratón de Madrid y morirme de la envidia.

Desde ese mismo momento, me puse el reto del medio maratón, porque un reto siempre ayuda a avanzar. Y como en enero y febrero estuve lesionada, no fue hasta este mes de octubre que me estrené.

He corrido dos medios maratones en quince días: el primero, el 15 de octubre en Lisboa, donde hice 1:59:01 y me di por satisfecha. Hacía mucho calor, era mi primera vez, no tenía nada con qué comparar, había bajado de dos horas, estaba en otro país y fui muy feliz terminándola tan bien de la mano del Bigotes.

El segundo fue ayer, 29 de octubre en Madrid, II edición del Medio Maratón de la mujer, menos multitudinario, con un recorrido bastante favorable (aunque el de Lisboa también lo era) y  con una temperatura ideal, lo que sumado a la compañía de tres amigas runners y pacer, aguador y fotógrafo deluxe, hizo que la completara en 1:50:04. Había bajado nueve minutos y disfrutado como una enana así que estuve todo el día pletórica.

Centrándome en las carreras, la primera me sirvió para ver que podía, aunque los kilómetros 12 a 16 se me hicieron eternos. En la segunda me di cuenta de que esos kilómetros no tienen por qué hacerse necesariamente largos, simplemente es que el recorrido de Lisboa era muy feo y monótono, nada que ver con correr -como ayer- por el centro de Madrid, donde los veintiuno pasaron en un plis plás.

Después de dos medios maratones, creo que puedo decir que me parece una distancia ideal. Cuando me lo planteaba al principio, me parecía una distancia muy larga, pero no: es algo asumible, entrenable y disfrutable. No es algo sacrificado como un maratón ni tan explosivo como un 10k... y es muy satisfactorio terminarlo. Vamos, ¡¡¡que os lancéis a intentarlo si os pica el gusanillo que no es para tanto!!!

Mi preparación. Desde el 1 de septiembre que volvimos de Vietnam y yo apenas podía correr media hora sin ahogarme, he intentado entrenar cuatro días por semana. Lunes y martes hago series, cuestas, o lo que toque con los grupos con los que entreno (CorreTuReto y NikeRunClub); el jueves he intentado hacer un trote tranquilo, mejor con compañía, despacito y necesario. Y los fines de semana he salido a correr con el Bigotes tratando de ir incrementando kilómetros hasta llegar a la tirada más larga, que esta vez llegó a ser de 16 kilómetros, porque en un mes y medio de preparación no hubo tiempo de más.

Mi valoración. Toda mi vida he sido Lisa Simpson, la educación física me bajaba la media, he empezado a correr con treinta y cinco años y estoy convencida de que mi marca se puede mejorar si sigo entrenando... así que si yo puedo, todas podéis. Solo hay que ponerse, en serio.

¿Qué planes tengo ahora? Aunque después de la carrera de ayer estoy con el gusanillo runner muy motivada, ya tenía decidido que desde ahora hasta enero voy a cambiar de prioridad. No me da la vida para todo, así que estos meses de noviembre y diciembre voy a correr menos y hacer más gimnasio, vuelta a mis flexiones, sentadillas, planchas y burpees, que es algo que me sienta muy bien por dentro y por fuera y que sé que también afectará positivamente luego a mis carreras. También quiero cuidar más mi dieta, que llevo una temporada caótica y comer bien me hace sentir bien. Y en enero, como Nacho Vegas: nuevos planes e idénticas estrategias.

Hasta aquí lo que os cuento sobre mi experiencia con el medio maratón. Espero que a las que no os hayáis atrevido aún os anime a intentarlo y al resto, a las que me leéis y le dais mil vueltas a esta runner novatilla que soy, me contéis vuestra experiencia, que a mí leeros me resulta súper inspirador.

¡Buena semana a todas y os espero mañana con novedades! :)

Aunque tengo muchas fotos de la carrera que me encantan, ilustro el post con esta de la revista sportlife que ayer nos sorprendió haciéndonos portada de la sección de noticias. Si es que no damos puntada sin hilo jajaja.